Cinco objetivos para un futuro brillante

Cómo aprovechar al máximo tu tiempo en la escuela y mantenerte enfocado.

Para los estudiantes de todo el mundo, la universidad es un lugar para descubrir, perder y reinventarse. Estos 2, 4, 6 o más años proporcionan la base para construir la vida que los estudiantes universitarios desean. Sin embargo, puede ser un desafío permanecer conectado a tierra al decidir lo que quiere para su futuro. Es especialmente extenuante para mí como estudiante universitario internacional. Debido a que me mudé a un nuevo país y encontré las nuevas experiencias estimulantes, seguí olvidando por qué elegí estudiar en un país extranjero. Entonces, para aprovechar al máximo mi tiempo en la escuela, me fijé cinco metas alcanzables. Estos objetivos me permiten formar relaciones significativas y experimentar una nueva cultura mientras me mantengo enfocado en por qué quería obtener una educación superior.

Objetivo uno: encontrar un mentor

Encontrar un mentor competente tiene varias ventajas, que incluyen la creación de redes, la asistencia profesional y la orientación. Sin embargo, si no sabe a quién preguntar, en ocasiones puede ser un desafío. Los profesores y los compañeros en sus respectivos campos son formas para que los estudiantes obtengan mentores. Los estudiantes se beneficiarán de establecer relaciones con personas que han trabajado en campos relacionados, ya que les ayudará a decidir la ruta profesional que quieren tomar.

Durante mi primer año de universidad, conocí a mi mentor. Mi profesor en ese momento me dio mucha fuerza y ánimo, así que reuní el coraje para acercarme a él. Continuó apoyándome académicamente y sugirió esfuerzos más difíciles que debería hacer. Estos incluyeron inscribirse en el programa de Honores, asumir roles de liderazgo y solicitar becas competitivas. Aunque sabía que perseguirlos sería difícil, su confianza en mí fue inmensamente alentadora.

Meta dos: Unirse a una organización estudiantil

Puede ser difícil sentirse involucrado en la universidad. Todos están en sus grupos y sociedades, por lo que la mayoría de los estudiantes pueden sentirse excluidos. Quería ser parte de la comunidad de mi escuela, pero no sentía que pertenecía allí. Entonces, para contrarrestar esto, consideré lo que me gusta hacer. El voluntariado fue lo primero que me vino a la mente. Es significativo y restaurador emocionalmente, así que busqué organizaciones escolares que me dieran oportunidades de voluntariado.

Descubrí que todos los clubes del campus tenían que hacer voluntariado, pero una organización lo llevó al siguiente nivel. Esa fue la Asociación de Gobierno Estudiantil. Estar involucrado en el Gobierno Estudiantil me introdujo a un mundo de personas amables y acogedoras que albergan la misma pasión que yo. Esta experiencia también me presentó muchas posibilidades increíbles de liderazgo, viajes y, por supuesto, voluntariado. Estoy solo al comienzo de mi viaje, pero las amistades que he formado hasta ahora me han hecho sentir orgulloso de mí mismo por aventurarme fuera de mi zona de confort y ponerme en posición de ayudar a los demás.

Meta tres: Ganar una beca

Ir a la universidad es una decisión que cambia la vida, pero también puede ser costosa. Los préstamos pueden ayudar a los estudiantes necesitados a pagar los gastos escolares, pero el gasto de pagar estas deudas después puede ser demasiado costoso. Del mismo modo, si bien aceptar un trabajo puede ayudar con las finanzas, también puede distraer a los estudiantes de la calidad de sus cursos. Como resultado, las becas permiten que muchos estudiantes naveguen por la vida universitaria sin cargas financieras adicionales. Las becas también pueden cubrir la matrícula y los gastos de manutención, lo que permite a los estudiantes concentrarse exclusivamente en sus estudios. Una beca será extremadamente beneficiosa para mí durante mis años universitarios; por lo tanto, estoy trabajando duro para obtener uno cuando termine mi carrera. Aunque pueden ser bastante competitivos, mi deseo de graduarme sin deudas estimula mi ambición de obtenerlos.

Meta cuatro: Desarrollar mis habilidades transferibles

La universidad es un momento para que los estudiantes crezcan personal y profesionalmente. Las habilidades transferibles , como la comunicación escrita y la puntualidad, son habilidades aprendidas que se pueden utilizar en todas las industrias. Como estudiantes universitarios, debemos reconocer nuestras habilidades transferibles y perfeccionarlas lo mejor que podamos. Además, al reconocer nuestras fortalezas y debilidades profesionales, podemos considerar fácilmente las áreas que necesitamos mejorar y encontrar formas de mejorarlas.

Luché más con mi manejo del tiempo y habilidades de comunicación verbal. Sin embargo, trabajé para mejorar mis habilidades de comunicación verbal asumiendo roles de liderazgo, hablando en eventos del campus y participando en discusiones grupales con regularidad. Además, desde que comencé a hacer intentos conscientes de administrar bien mi tiempo, el equilibrio entre mi vida académica y social en la universidad ha mejorado. Identificar tus debilidades rara vez es un proceso fácil, pero intentar rectificarlas siempre es recomendable.

Meta cinco: aprender otro idioma

Hablar un segundo idioma es un talento importante ya que te permite interactuar y conectarte con personas de todo el mundo de manera más significativa. Aprender un segundo idioma cambiará tu perspectiva sobre muchos aspectos de la vida. Aquellos que estudian otro idioma también aumentan su capacidad para recordar y procesar nueva información, lo que resulta en un mejor desempeño en áreas no relacionadas. Siempre he querido hablar español con fluidez, y ahora que he conocido a tantas personas que hablan español, estoy aún más motivado para hacerlo. He estado aprendiendo el idioma por mi cuenta durante más de un año, y me ha conectado y expuesto a una nueva cultura. Aunque hice una pausa cuando comencé la universidad, tengo la intención de aprender el idioma nuevamente en el futuro y, tal vez, volverme más competente.


Jillian Ireland de Jamaica está estudiando seguridad cibernética en Hillsborough Community College en Tampa, Florida.